jueves, 18 de junio de 2015

EL RETRATO por LILIANA SOSA


Pinceladas de bermellón en degrade
perdiéndose en la profundidad
de un camino en perspectiva.
La mujer del retrato me observa
gris acero en los ojos y una lagrima de luz
que se resbala por la mejilla color fuego
hacia las manos amarradas con un lazo azul cobalto.
Mariposas doradas se escapan del vestido
dejándolo níveo, desnudo,
desmayado sobre las piernas largas.
Desmenuzó el pintor el alma y salpicó con ella
el carmín de los labios.
Atado al embrujo de esa mirada
me descalzo y embriagado giro por la habitación
me tomo de las alas de una mariposa descuidada
y me pierdo en la cabellera encarnada.

jueves, 14 de mayo de 2015

DESDE LA VENTA por LEONOR CIERI


Desde la ventana veo pasar
la Caridad y detrás la Gratitud.
Veo pasar la Tristeza perseguida por
la Alegría y el Júbilo tomados de las manos.
Veo pasar un puñado de tierra abonada y
detrás, saltando, un grano de trigo.
Veo en la oscuridad una luz que nace
de una estrella, iluminando mis Sueños que
pasan rápidos, huyendo de la Realidad.
Veo pasar muy lentamente a la Esperanza
para dejarse alcanzar por
la tan ansiada Paz.

domingo, 10 de mayo de 2015

LAS PALABRAS por SILVIA BALBUENA



                                      Las palabras

                  “…sin embargo cuando lo perdió, no compartió con la                            familia el duelo…” del cuento “Los objetos” de                                                                                    Silvina Ocampo




    Tenía objetos entrañables. Capturados en sus expediciones por los mares del mundo. Guardados de sus juegos infantiles.          
    Atesorados de entrañables regalos. Objetos que acariciaba con sus manos, con sus pensamientos, que engalanaba con sus sonrisas.     No quería compartirlos, eran de ella, de sus momentos, de sus sabores y sinrazones. De sus ganancias y sus pérdidas. De sus albores y sus atardeceres. De sus historias.
    Los fue guardando meticulosamente. Escondidos de las burlas de sus padres, de las sátiras de sus amigos, de las manos revoltosas de su hermano menor. Aislados del paso del tiempo. Eran testimonios de momentos, cuentas desenhebradas en sus laberintos, pasadizos de sus entrañas.
    Pero un día los años la ganaron, espacios conocidos desaparecieron, miradas escudriñadoras se alejaron y los objetos perdieron su razón de existir. Y así, inexorablemente, como suceden las estaciones o los ciclos de la luna, sucedió: los objetos perdieron su materialidad. Y se transformaron en palabras, en un abstracto simbólico. En una entelequia que sólo le pertenecía a ella.
    Hasta que un día, encontró que esas palabras que eran sus cenizas, empezaron a circular en ideas, en frases, en versos.       
    Necesitó escribirlas y así resultaron brasas, llamas, fuegos.

    Las siente fuegos fatuos con sus contradicciones. Son una esperanza, una meta. O un desconcierto, un siniestro. A veces desea salir a capturarlos, los ve que se agarran a paisajes, se enroscan en sensaciones, se deshacen en gases violentos. Desea que esos fuegos fatuos no se le escapen, no la engañen, que la iluminen aunque sea tenuemente. Tiene miedo de mirarlos, que la enceguezcan, que la oscurezcan con su fugacidad. Que la rodeen y la ahoguen. Pero los necesita, los persigue.
    A veces percibe que en el interior más ígneo de esos fuegos fatuos, arde la llama de lo perenne, del vencimiento de la muerte.

    Sabe que los objetos transformados en palabras, textos, poemas, que aprendió a escribir y compartir, son eternos, perdurables, que vencen a las no presencias, a la muerte. Y que no tendrá necesidad de duelo ni dolor de ausencia. Las palabras y los fuegos seguirán allí.

lunes, 27 de abril de 2015

LA LLAVE SE ESCONDE por Anabella Zilli



La llave se esconde detrás de la cortina azul, poblada de mariposas.
El baúl esta debajo de la cama. Y en él, objetos, recuerdos, nostalgias, alegrías, sueños, escribo sobre él una frase cada vez que lo abro. Hoy dice. Pasado.
A veces lo veo vacío.
A veces está lleno.
No me sorprende si al abrirlo un objeto sale volando hacia otra habitación.
O si la muñeca justo llora al cerrarlo.
Pueden tener o no valor, pero están, como huellas, en el alma, en la piel, el olfato, la vista, los oídos. Laten, viven.
Una cajita musical, quedó afuera, sonó durante toda la noche, pero ya no la escuchaba, le di color, olvidé su sonido… recordé su movimiento, la bailarina, daba vueltas, giraba.
Mi mente también. Mi alma aun más.
No hay terapia que borre algunos recuerdos que duelen, tampoco hay objetos que no ocupen el lugar que uno le quiere dar.

domingo, 12 de abril de 2015

SUEÑOS por María Ester Aquino




                 Donde van los sueños

               que no se cumplen

                se dan por vencidos,

                abandonan la búsqueda?

                o aletargados e insomnes 

                esperan el toque mágico

                 que los rescate de las tinieblas

                 o se resignan al olvido?


                   Me persigue el humo gris de tu mirada

                  trepa por mi sombra

                  y  se hunde en el abismo

                   alucinante de mis fantasías.

                   Mis sueños enredados

                    en la telaraña del pasado

                    pugnan por emerger

                     y hacerse realidad.   

lunes, 6 de abril de 2015

COMIENZO DE TALLERES 2015

CLASE ABIERTA DE TEATRO

El viernes 27 de marzo, en el Distrito Noroeste, se realizó la clase abierta de teatro a cargo de la profe Laura Carassai.  Una tarde diferente donde el cuerpo fue el protagonista. Participaron los talleres de Plástica, Técnicas Mixtas, Literario y Teatro. Muchas gracias Laura por el encuentro!!!