Te descubrí en medio de la gente
tu sombra magenta entre sombras negras.
Me miraste con tus ojos de agua
y el azul violáceo de mi alma
se transformó en dorado.
El aleteo de tus alas
me rozó cuando pasaste,
cerré los ojos, te aspiré entera
y no pudiste escaparte,
quedaste mía para siempre
en el azul cobalto de la espera.
2 comentarios:
Mamá el cuento corto que escribiste para Bauti me encanto!!!
¡Qué hermoso, me encanta!
Y me permito llevarme un cachito...
Gracias Liliana.
Un abrazo rosa.
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