Una sirena muy
vieja, ha llegado hasta la playa,
quiere salir de
ese mundo, busca ser libre, olvidar.
Tiene un sueño
roto, tuvo pasiones muy fuertes,
es el momento o
nunca, le hicieron daño,
fue allá en el Mar Adriático, donde lo conoció,
era el Rey de
los Mares, quien de ella se prendó.
Un perverso día,
tras de otra se marchó,
una sirena
pecosa, nadando se lo llevó.
Se prometió un
olvido, renunciar al dolor.
Está perdida,
llueve,
sus largos cabellos
cubren su arrugado físico.
Pero, hoy
saldrá, vino muchas veces,
tratando de
buscar las novedades,
salió a la luz,
quiere entrar a un lugar de ritmo,
debe probar,
pero... no tiene alas ni piernas.
Se convence, no
queda otra esperanza,
su piel empezó
a secar,
me ve, me
saluda, le tiro un beso,
y esta abuela
de mar, se fue, se fue.
1 comentario:
MUY BONITO,BETTY...CARIÑOS!
Publicar un comentario